El Presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Magistrado Maikel José Moreno Pérez, estaría administrando justicia como emplearía una aerolínea comercial aparentemente de su propiedad, “La Venezolana”, para sacar provecho propio, sin reparar que en ambos casos es un servidor público, condición que le habría reportado una fortuna incalculable como resultado de la protección que le brindaría a la camarilla corrupta que detenta el poder en Venezuela, cometido que compartiría con la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, y su esposo, el diputado chavista, German Ferrer, como buenos amigos y camaradas que son, además del gusto en común por la aviación comercial que a la par los acercaría.

“La Venezolana” deja varados a decenas de pasajeros en Maiquetía, sin la debida asistencia, a los pasajeros no se les garantiza los derechos de los usuarios del servicio de transporte aéreo. Un controlador aéreo, que pidió mantener su nombre en reserva, indicó: “esos retrasos y suspensión de vuelos se deben a que La Venezolana prioriza el uso de sus aeronaves en los destinos internacionales”. “En todos los sentidos”, desde el TSJ y en “La Venezolana”, Maikel Moreno no garantizaría derechos ni proporcionarían debida asistencia a quienes se debe como servidor público, sino que consagraría todos sus esfuerzos en favor de quienes lo pusieron en el cargo, en la misma medida como obtendría divisas con “La Venezolana”.

Esa conducta del Magistrado en el TSJ, procedería de su dedicación exclusiva a “blindar” las acciones del Ejecutivo Nacional, ignorando la Carta Magna, lo que ocurrió cuando la Sala Constitucional ordenó revisar la política exterior y definir límites de la inmunidad parlamentaria. ¿A quién beneficia esa Sentencia de fondo que dejaría sin efecto el acto parlamentario pidiendo activar la Carta Democrática? Beneficia a Maduro, quien arreglaría con Maikel Moreno salirse de la OEA. ¡Ya! Sin esperar los dos años reglamentarios. Para que no le apliquen la Carta o, en su defecto, anularla en Venezuela diciendo que es violatoria de la Constitución.

“Este desbarajuste de sentencia”, simboliza los procedimientos de protección al régimen, concebidos por quienes, como Maikel Moreno, Luisa Ortega Díaz y, su esposo, German Ferrer, no tendrían otra función que legitimar atrocidades del Estado Tirano, en ello se les iría la vida, más allá de lo que exija el pueblo venezolano o de lo que les compete a los diputados en el ejercicio de sus funciones, restringiéndonos a todos por igual, en razón de ello incurrirían en ilícitos constitucionales y penales. El desvió del hilo constitucional, así como desvían los aviones de “La Venezolana”, incita un conflicto de poderes que hace imperceptible el provecho que se consigue a partir del mismo, ajeno al entendimiento político en Venezuela y que no implica mejor acceso a la justicia ni defensa de la institucionalidad democrática.

DERECHO A REPLICA. En relación a mi artículo “La Fiscal General, el esposo y sus intereses psuvistas”, María Elena Guevara, en su condición de Gerente de Asuntos Públicos del B.O.D., tuvo a bien hacerme la siguiente aclaratoria: “En esta nota usted hace referencia al señor Víctor Vargas como un allegado de la Fiscal General de la República, acusándolo además de usufructuar el erario público venezolano. …queremos hacer de su conocimiento que Víctor Vargas no tiene ni ha tenido relación con la Fiscal General de la República ni está ligado a ningún caso de explotación del tesoro público de la nación”. Leer más:https://t.co/D3JamroXG5